Si en sus planes está viajar a Estados Unidos debe tomar en cuenta que, a partir del próximo 26 de enero, todos los viajeros que lleguen a ese país en avión deberán presentar un test de covid-19 negativo realizado en los tres días anteriores a su vuelo.

«Hacer un test no elimina todos los riesgos, pero cuando se combina con un periodo de cuarentena y las precauciones cotidianas como llevar mascarilla y la distancia social, puede hacer los viajes más seguros», dijo Robert Redfield, director del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
La decisión extiende una norma adoptada en diciembre tras la aparición de la cepa británica del coronavirus, que es mucho más contagiosa que la que azota al mundo desde hace un año.
El CDC también recomienda a los viajeros volver a examinarse entre tres y cinco días después de llegar y quedarse encerrados por al menos una semana.
Los exámenes deben ser para la «actual infección» y los pasajeros tienen que presentar a las aerolíneas una prueba escrita de sus resultados antes de abordar.