Hoy se celebra el Día de los Muertos en México, y el centro de la capital no escatima en cuanto colores, sabores y devociones de este día.
Yo me hospedo en un hotel cercano al Zócalo, a una cuadra del centro.
Desde temprano se ve bastante movimiento en El Zócalo y en las calles aledañas. En la noche habrá mucho más movimiento.
Más tarde se realizará un desfile y los altares se encenderán con candelas y luces.
En el Zócalo hay muchas personas maquilladas tanto de calaveras como de Catrinas.
Algo que me sorprendió bastante fue la devoción que existe, es un ambiente muy religioso y de recordación a sus seres queridos que han fallecido.
Ayer fui a San Andrés Mixquic, pueblo en el que se inspiró la película de Disney Coco.
Hay varias formas de llegar al lugar, yo por ejemplo llegue en Metro, con la línea 2 dirección Taxqueña y luego tomé un autobús a Mixquic que dura unas dos a tres horas.
Había demasiada gente y casi no se podía caminar, pero lo más lindo era ver los altares en las casas con las fotos de sus seres queridos.
La mayoría de altares era de 7 niveles que representan los niveles que debe pasar un alma para llegar a su paz espiritual.
Fuimos ayer porque queríamos estar en el Zócalo hoy para ver los festejos ahí, y además porque hoy los turistas llegarán a ese pueblito en masa, viendo la efervescencia de la película Coco.
Comí además pan de muerto, que es riquísimo y que se pone en los altares de cada casa.
Fotos y texto por: David Solís